El 23 de abril es el Día del Libro, más concretamente el Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor, y en De Salas queremos celebrarlo, aunque este año será de otra manera. Quizá más especial pero sin duda diferente, aunque por suerte, para disfrutar de una buena lectura, lo que pide el entorno es un rincón tranquilo, buena iluminación y no mirar el reloj. Perfecto para estos tiempos de confinamiento.
Curiosos por naturaleza, hemos querido darle un pequeño giro a este día, y no solo recomendar lecturas, sino contar curiosidades para convertirnos, nosotros también aunque de manera modesta, en material de lectura. Y hemos aprendido, por ejemplo, que la fecha elegida no es por azar, al contrario, tiene una connotación muy literaria.
Y es que un 23 de abril, nacieron o murieron nombres tan ilustres como Miguel de Cervantes, William Shakespeare, Inca Garcilaso de la Vega, William Wordsworth, Vladimir Nabokov, Josep Pla o Manuel Mejía Vallejo. Por este motivo, fue elegido por la Conferencia General de la UNESCO para rendir un homenaje mundial al libro y sus autores, proclamando el Día del Libro.
A pesar de parecer un día muy arraigado, lo cierto es que el origen se remonta a 1926, es decir, hace menos de 100 años. Y la idea partió de Cataluña, del escritor valenciano Vicente Clavel Andrés, que propuso celebrar el Día del Libro en la cámara Oficial del Libro de Barcelona en 1923, evento que fue aprobado por el rey Alfonso XIII en 1926. Lo de las rosas es una costumbre allí porque coincide con San Jorge – Sant Jordi, su patrón, y es costumbre regalar una rosa al concluir una lectura.
Todos los actos previstos para este día han sido postergados sin fecha, como la entrega del Premio Cervantes 2020. Tampoco está de más decir que no es la primera vez que esta cita se pospone. La Guerra Civil, que cayera en domingo o porque coincidía con la Semana Santa fueron algunas de las causas que hicieron que bailara en el calendario. Pero no vamos a renunciar a un buen libro, y este año, además de la clásica lectura del Quijote, que será virtual, hay múltiples propuestas para disfrutar del Día del Libro.
Por ejemplo, visitar también de manera virtual, algunas de las bibliotecas más bonitas del mundo. Como la Biblioteca Pública de Évora, una de las más antiguas y ricas de Portugal. Fue inaugurada en 1666 e incluye 664 incunables, 6.445 libros impresos del siglo XVI, manuscritos, y títulos de publicaciones periódicas. No es de extrañar que muchos investigadores la visiten para sus estudios.
Situada en el centro de Valletta, la Biblioteca Nacional de Malta es uno de los grandes tesoros que guardan las islas maltesas. Un lugar de referencia que preserva la memoria del país con obras que abarcan desde la Edad Media hasta la era digital. Todos sus documentos cobran una gran importancia, no solo para entender la historia de las islas maltesas, sino también para la evaluación de la historia europea y mediterránea.
En Santa Cruz de La Palma tiene su sede la Real Sociedad Cosmológica, fundada en 1881, y cuya biblioteca (creada posteriormente) es una de las más singulares y antiguas. El objetivo de esta institución centenaria ha sido promover el conocimiento de las ciencias naturales a lo largo de su historia. Ha tenido un papel muy relevante en la historia científica de Canarias y en su seno se reunieron médicos, botánicos, humanistas o investigadores reconocidos.
Y la Biblioteca del Trinity College de Dublín es una de las más imponentes e icónicas del mundo, tanto por su espectacularidad visual como por la historia que guarda en sus pasillos, pues ha recibido visitas ilustres como Oscar Wilde, Samuel Becket o Bram Stoker.
Pero podemos quedarnos más cerca y aprovechar la gran fiesta en directo que celebrará el Grupo Editorial Penguin Random House, que reunirá a más de 80 autores y periodistas relevantes del mundo de la cultura. Bajo el nombre Casa Tomada, el evento empezará a las 9:30 y finalizará a las 22:00 con dos programaciones en paralelo que se podrán seguir en el Instagram @Megustaleer y @Magradallegir.
Está claro que el Día del Libro no tiene porqué dejar de celebrarse, y de hecho en De Salas creemos que el mejor homenaje que le podemos hacer es quedarnos en casa, con una buena lectura en las manos, y mirando por la ventana mientras estos tiempos convulsos pasan.
Gala Mora
DESALAS Lifestyle