Los barcos más bellos y emblemáticos del mundo se dan cita en la Copa del Rey de Vela de Clásica de Menorca, que en su XV edición ya se ha convertido en una cita obligada para todos aquellos que quieren disfrutar del mar y sus embarcaciones de otra manera. Del 28 de agosto al 1 de septiembre el Puerto de Mahón acogerá a estas “damas del mar”, verdaderos museos con velas que constituyen en sí mismas un símbolo del arte naval, y que evocan la historia, la tradición y las hazañas de antiguos navegantes.
Resulta fascinante poder contemplarlas navegando al abrigo natural del puerto de la isla, uno de los más estratégicos de todo el Mediterráneo occidental y que posee un altísimo poder de convocatoria por la singular belleza de sus paisajes, además por supuesto, del magnífica espectáculo que ofrecen los veleros en regata, por las cristalinas aguas de Menorca, que goza de una gran variedad de vientos, tal y como aseguran desde la organización.
Y es que Menorca conserva ese aire salvaje y paradisíaco de las islas más vírgenes, a pesar de tratarse de uno de los destinos más deseados, y por ello exclusivo, de nuestro país. Calas de un turquesa imposible, villas perdidas en medio de pinares, vistas espectaculares y todavía callejuelas por pasear la han convertido en sí misma en un reclamo que no hace sino realzar la de por sí belleza de la regata. Ésta quedará dividida en las cuatro clases tradicionales: Época (hasta 1950), Clásicos (de 1950 a 1976), Espíritu de Tradición y Big Boats, a las que se añadirá una nueva categoría para embarcaciones aparejadas como goletas.
La prueba es puntuable para el Trofeo Mare Nostrum y para el Campeonato de España de Clásicos, y en ella ya han participado un total de 144 embarcaciones tan emblemáticas como Agneta, Bonafide, Eleonora, Galvana, Stella Polare o Vernique.
Mahón, Ciudadela, la Fortaleza de la Mola, Cala Macarella, Naveta des Tudons… Menorca es un destino mágico y la regata puede ser un buen momento para explorarla y disfrutar de este paraíso natural y exclusivo donde nuestros clientes de De Salas se encontrarán sin duda como en casa. Para ello lo mejor es alojarse en pequeños refugios de paz que ayuden a envolver con más magia todavía el estilo único de esta isla.
Can Faustino es uno de los hoteles más reconocidos de la isla, un encantador palacio que se abre a un patio de árboles con vistas al antiguo puerto. La construcción data del siglo XVI pero ha sido remodelado y ahora dispone 21 discretas habitaciones y 3 suites, desde 332 euros la noche.
Hotel Cugó Gran Menorca, es una selecta villa ubicada cerca del pueblo de Sant Climent, que cuenta con solo 12 habitaciones de ensueño con servicio de mayordomo, gimnasio y tratamientos, por 525 euros.Insotel Punta Prima Prestige Suites & Spa es un lujo asiático casi en toda su extensión, dispone de 52 exclusivas y espaciosas Prestige Suites, de estilo típicamente menorquín, y ofrece una atmósfera relajada además de unas espectaculares vistas al mar, desde 350 euros la noche.Despedir el verano y recibir los últimos coletazos de aire mediterráneo mecido por las aguas de Menorca mientras se observan soberbias embarcaciones clásicas parece la forma perfecta de cerrar esta estación. Aviso a navegantes: no lo dejen pasar, esto solo sucede una vez al año.
Gala Mora
DESALAS Lifestyle