Cada año, entre el 17 y el 25 de febrero, más de 5 millones de personas se desplazan a Brasil para participar en los carnavales más icónicos del planeta Tierra. Hoy queremos compartir, con nuestros amigos y clientes de De Salas, algunos de los datos más curiosos y relevantes que han hecho que todas las personas del mundo, al menos una vez en la vida, deseen viajar a Brasil para experimentar en vivo la magia de los carnavales más espectaculares del mundo. ¿Nos acompañas?
El turismo relacionado con el Carnaval es un gran impulsor de la economía del país, ya que muchas personas de todo el globo viajan a Brasil para participar en estas multitudinarias celebraciones. Y no es de extrañar, ya que en estas fechas la capacidad hotelera se incrementa en un 30% para recibir a los turistas que gastarán un promedio de unos 3000 dólares en una semana durante esos días.
Considerado uno de los más grandes y famosos del mundo, el Carnaval de Río de Janeiro, cuenta con más de 2 millones de personas participando en sus celebraciones cada año, pero se celebran carnavales en todas las ciudades más importantes de Brasil.
El Carnaval de Salvador de Bahía es muy conocido por su música afro-brasileña y sus desfiles de escuelas de samba. Mientras que el Carnaval de Olinda, en Pernambuco, es conocido por su animada fiesta popular con desfiles de murgas y bandas de percusión. Y es que el Carnaval de Pernambuco es uno de los más antiguos y tradicionales de Brasil.
El Carnaval de Recife es también muy famoso por sus desfiles de blocos, que son las bandas de música que desfilan por la calle y que tienen gran seguimiento popular. Por su parte, el Carnaval de São Paulo es el más grande del país en términos de número de participantes y de espectadores.
Y ahora nos preguntamos, ¿Desde cuándo se celebran los carnavales en Brasil? Tenemos que remontarnos al menos al siglo 17, cuando los colonizadores portugueses introdujeron la tradición en el país. Los carnavales tradicionales de esa época se celebraban principalmente en las ciudades costeras y eran organizados por las élites sociales. En el siglo 19, los carnavales se popularizaron y comenzaron a ser celebrados en todo el país, con un gran énfasis en la música, el baile y el desfile de escuelas de samba.
Así que los carnavales tal y como los conocemos ahora comenzaron en 1937, inspirados en los bailes de máscaras del Carnaval de Venecia. Por aquel entonces, el director del Teatro Municipal de Ópera de Río de Janeiro, Silvio Piergilli, decidió establecer una Gala de Baile de Carnaval en la que se destacarían lujosos disfraces y competirían por premios.
Este baile con sus concursos de disfraces continuó hasta 1972 y se fue extendiendo a otros lugares. De esta forma comenzó la tradición de artistas brasileños y celebridades de la televisión vistiendo estas elaboradas obras maestras de disfraces tanto en los bailes de Carnaval como durante los desfiles oficiales de Carnaval, donde los presentadores de las retransmisiones se transforman en Estrellas del Carnaval.
La producción de un traje de lujo de esta categoría puede costar hasta cincuenta mil dólares. Cada disfraz puede estar compuesto por miles de plumas y cantidades impresionantes de lentejuelas, pedrería, cristales Swarovski y piedras semipreciosas. Todo el material está cuidadosamente bordado a mano, lo que da como resultado una magnífica artesanía brasileña auténtica.
Pero si no te quieres meter en el meollo de los carnavales o no tienes la oportunidad de visitar Brasil en plenas celebraciones de Carnaval, eso no quiere decir que no vayas a poder ver ni plumas, ni encajes ni nada. No te preocupes porque en Brasil hay varios museos donde puedes visitar algunas de las colecciones exhibidas durante estas fiestas.
Uno de los museos más conocidos, por ser el más visitado es el Museu da Fantasia, ubicado en Río de Janeiro. Este museo cuenta con una amplia colección de trajes de carnaval, incluyendo algunos de las más elaboradas y costosas creaciones de las escuelas de samba de Río. Aquí también podrás admirar gran variedad de accesorios de carnaval, como coronas, máscaras y otros adornos.
En Salvador de Bahía, existe el Museu da Cidade de Salvador que cuenta con una sección dedicada a los trajes de carnaval y a toda la cultura popular.
Si tu destino es Recife, aquí podrás visitar el Museu do Carnaval es un museo dedicado a la historia del carnaval de la ciudad que cuenta con una gran variedad de trajes de carnaval, fotos, pinturas y objetos relacionados con el carnaval de este lugar.
Como no podía ser de otra manera, São Paulo, también tiene su propio museo del carnaval, el Museu da Imagem e do Som (MIS) que cuenta con una sección dedicada al carnaval de la ciudad, con trajes, fotos, vídeos y todo tipo de objetos curiosos relacionados con estas fiestas.
Esperamos haberte podido acercar el encanto y el espíritu más auténtico de los carnavales y estamos seguros de que la opción de verlos en vivo y en directo ahora está mucho más cerca de lo que piensas. Te esperamos la próxima semana con más contenido exclusivo, pero hasta entonces disfruta de nuestra selección de mejores casas de la semana.
¡Nos vemos!