Más allá de las grandes ciudades y los destinos culturales, existen rincones del planeta donde la naturaleza se manifiesta en todo su esplendor. Son los parques nacionales, santuarios ecológicos que combinan paisajes extraordinarios con experiencias transformadoras. En este episodio de De Salas LifeStyle te llevamos a descubrir cinco parques nacionales que son auténticos tesoros naturales.
Yellowstone – Estados Unidos
Fundado en 1872, Yellowstone fue el primer parque nacional del mundo. Situado en el noroeste de Estados Unidos, es famoso por sus géiseres (como el Old Faithful), el Gran Cañón del Yellowstone, su fauna salvaje y su energía volcánica latente. Recorrerlo es adentrarse en un ecosistema vivo, donde aún hoy se puede dormir en lodges históricos con todo el confort en plena naturaleza.
Parque Nacional del Serengeti – Tanzania
Este parque en Tanzania es sinónimo de vida salvaje en estado puro. Es hogar de la mítica Gran Migración de ñus, cebras y gacelas. La experiencia se eleva con un vuelo en globo aerostático al amanecer seguido de una cena gourmet bajo las estrellas en un campamento de lujo. Un lugar para entender la inmensidad del África salvaje desde la elegancia y el respeto a su biodiversidad.
Torres del Paine – Chile
Ubicado en la Patagonia chilena, este parque mezcla glaciares, montañas esculpidas por el viento y lagos turquesa. Es un paraíso para senderistas, fotógrafos y amantes de la soledad natural. Las experiencias exclusivas incluyen paseos a caballo, navegación en catamarán o sobrevuelos en helicóptero para captar la magnitud del paisaje desde el aire. Todo con la elegancia de los mejores eco-lodges de la región.
Kruger – Sudáfrica
Con más de 19.000 km², el Parque Nacional Kruger es uno de los más grandes del continente africano y permite encuentros únicos con los Big Five: león, leopardo, elefante, rinoceronte y búfalo. Aquí, los safaris se disfrutan desde lodges boutique con suites privadas, servicio personalizado, cenas bajo las estrellas y terrazas que miran hacia la sabana.
Fiordland – Nueva Zelanda
El Parque Nacional Fiordland, en la Isla Sur de Nueva Zelanda, es una sucesión de fiordos, selvas lluviosas, montañas y cascadas que parecen salidas de una fantasía cinematográfica. El Milford Sound, con sus aguas profundas y acantilados verdes, se puede recorrer en yate privado al atardecer para una experiencia realmente mágica.
Visitar estos parques no es solo una aventura visual: es una forma de conexión con lo esencial. Es escuchar el silencio del bosque, el rugido de un león, o el estruendo de un géiser como parte de una experiencia de lujo que trasciende el alojamiento o el transporte.
En De Salas creemos que el auténtico lujo reside en las vivencias memorables. Por eso, te invitamos a dejarte inspirar por estos destinos naturales que transforman y a seguir acompañándonos en este viaje por el mundo desde la mirada única de De Salas LifeStyle.
¿Qué parque nacional te ha impresionado más? ¿Dónde organizarías tu próxima escapada en contacto con la naturaleza?




